Rescate implacable, no es otra simple película de acción

Rescate Implacable no pretende revolucionar el género de acción, pero cumple su propósito: ofrecer un viaje entretenido, con un misterio intrigante y escenas de acción bien ejecutadas.
Esta es la segunda colaboración entre el director David Ayer y Jason Statham, tras “Beekeeper”. Aquí, Statham interpreta a Levon Cade, un trabajador de construcción muy apreciado por sus compañeros y por la familia dueña de la empresa, él responde no solo responde con cordialidad y hasta de ser necesario, ¡Con los puños!
Sin embargo, cuando la hija del dueño (Michael Peña) es secuestrada, Levon deja atrás su vida tranquila y regresa a su pasado: un pasado militarizado con habilidades letales.
El filme introduce subtramas como la trata de personas, la corrupción policial, los crímenes de los más ricos y hasta la Bratva, todas convergiendo en un clímax de acción bien orquestado. Aunque sin muchas sorpresas, el entretenimiento está garantizado.
David Ayer no reinventa el género, pero poco a poco va moldeando un estilo propio dentro de la acción. Rescate Implacable es justo lo que promete: una película de acción directa, sin pretensiones, pero efectiva para desconectarse un rato.
Texto: Victor Oswaldo Regina