Terence Crawford no tiene en sus planes una revancha contra Canelo Álvarez

Terence "Bud" Crawford, el invicto boxeador estadounidense que hizo historia al destronar a Saúl "Canelo" Álvarez en su combate del sábado por la noche en el Allegiant Stadium, ha dejado claro que no tiene interés en concederle una revancha al mexicano. En una entrevista post-pelea con ESPN, Crawford, ahora campeón indiscutido supermediano con un récord de 42-0, afirmó: "Le quité sus títulos y lo hice en su noche mexicana. No hay nada más que probar; mi legado está asegurado". La victoria por decisión unánime (116-112, 115-113, 115-113) ante más de 70.000 espectadores no solo coronó a Crawford como el primer hombre en ser campeón indiscutido en tres divisiones en la era de cuatro cinturones, sino que también generó especulaciones inmediatas sobre un segundo asalto, las cuales el de Omaha descartó rotundamente.
Esta postura de Crawford llega en un momento en que Canelo, quien embolsó 100 millones de dólares por la pelea, expresó en rueda de prensa su deseo de una revancha para redimirse de la derrota que lo dejó con un récord de 62-2-2. "Vine a tomar riesgos y aquí seguiré", declaró Álvarez, visiblemente afectado pero dejando la puerta abierta. Sin embargo, Crawford, quien ascendió dos divisiones para enfrentar al rey del supermediano, argumentó que su enfoque ahora está en defender sus nuevos cinturones contra rivales en su peso natural o en exploraciones mayores, como un posible superfight con el campeón pesado. Su masterclass en el ring, con 115 golpes conectados contra 99 de Canelo, demostró su superioridad en velocidad y defensa, haciendo que una revancha parezca poco atractiva para el nuevo monarca.
El rechazo de Crawford no solo cierra un capítulo en la rivalidad sino que resalta su estatus como uno de los mejores libra por libra del boxeo actual. A sus 37 años, el peleador de Nebraska ha superado críticas sobre su tamaño y ha transformado su legado en una noche que eclipsó el Día de la Independencia Mexicana, diseñado para glorificar a Álvarez. Expertos como Teddy Atlas elogiaron su "brillantez absoluta", destacando cómo evitó los contragolpes de Canelo y dominó las distancias cortas. Mientras Álvarez evalúa su futuro, posiblemente contra Jake Paul o un regreso a pesos inferiores, Crawford ya mira hacia defensas obligatorias o un duelo con Dmitry Bivol, priorizando su invicto sobre rematches lucrativos.
Esta decisión de Crawford genera un vacío en el panorama del boxeo de élite, donde una revancha habría sido un evento millonario transmitido por Netflix, que ya documentó el campamento en "Countdown: Canelo vs. Crawford". Para los fanáticos, el cierre definitivo añade peso a la victoria de Bud, consolidándolo como un ícono histórico junto a leyendas como Floyd Mayweather. Mientras el mundo del boxeo digiere el upset, Álvarez deberá reinventarse sin la oportunidad inmediata de venganza, y Crawford sigue forjando su camino invicto, demostrando que no todo se trata de dinero, sino de legado.