Escándalo de apuestas en la NBA: El FBI detiene a más de 30 personas en red ligada a la mafia
En una operación de gran envergadura, el FBI ha realizado detenciones masivas contra una red de apuestas ilegales y manipulación de partidos en la NBA, con vínculos directos a familias de la mafia. Entre los arrestados destacan el entrenador de los Portland Trail Blazers, Chauncey Billups, y el guardia de los Miami Heat, Terry Rozier, acusados de participar en esquemas de fraude y lavado de dinero. Las autoridades federales desmantelaron esta operación que involucraba apuestas internas sobre juegos de baloncesto y partidas de póker amañadas, con un monto estimado en decenas de millones de dólares.
La investigación, liderada por la Oficina del Fiscal del Distrito Este de Nueva York, reveló una conspiración que se extendía por varios estados y que incluía a jugadores activos, exjugadores y figuras del crimen organizado. Según el Departamento de Justicia, al menos 31 individuos fueron imputados por cargos que van desde extorsión hasta blanqueo de capitales, con nombres como Damon Jones, Eric Earnest y Deniro Laster entre los principales implicados. Las detenciones se produjeron simultáneamente en varias ciudades, y los acusados comparecerán en corte federal este jueves para enfrentar las formalizaciones.
Este escándalo sacude los cimientos de la NBA en un momento en que la liga ha intensificado sus esfuerzos por regular las apuestas deportivas tras la legalización en varios estados. Billups, un Salón de la Fama como jugador, y Rozier, estrella en ascenso de los Heat, enfrentan posibles suspensiones indefinidas, lo que podría alterar el curso de la temporada actual. La liga emitió un comunicado condenando las acciones y prometiendo cooperación total con las autoridades, mientras que analistas advierten sobre el riesgo de erosión en la integridad del deporte.
Las repercusiones podrían extenderse más allá de la cancha, con posibles reformas en las políticas de apuestas de la NBA y un escrutinio mayor sobre las conexiones entre el deporte profesional y el juego ilegal. Autoridades describen el esquema como "asombroso" por su escala y sofisticación, y prometen continuar las pesquisas para desarticular cualquier remanente de la red mafiosa. La opinión pública, reflejada en redes sociales, oscila entre el shock y la indignación, recordando escándalos pasados como el de Tim Donaghy en 2007.
